Sumergir las latas de cerveza o botellas en un cubo de hielo se enfriará rápidamente. Añadir agua al hielo y la cerveza se enfriará aún más rápido, pero para los resultados más rápidos, utilice una combinación de hielo, agua y sal. La sal hace que se derrita el hielo rápidamente por lo que la cerveza se vuelve completamente rodeada de agua enfriada con hielo. Revuelva unas cucharadas de mesa o sal de roca en un balde o recipiente de partes iguales de hielo y agua y añadir las cervezas. Gire las cervezas cada pocos minutos hasta que estén frías. Enjuague las latas o botellas antes de beber de ellos. Algunas personas juran también envolviendo una toalla de papel húmeda en torno a una cerveza y se pega en el congelador, pero no obtendrán la cerveza más fría de manera espectacular con este método que usted si simplemente pegar la cerveza en el congelador.