El alcohol puede tener una serie de diferentes efectos físicos en un adolescente. Además de frenar las principales funciones de su cerebro y el sistema nervioso central, el alcohol puede afectar en gran medida sus habilidades de coordinación y motoras. La evidencia científica citada por el Dr. John Nelson, de la Asociación Médica de Estados Unidos muestra que el consumo de alcohol en los adolescentes puede conducir a daño cerebral permanente. También puede dañar la función renal y hepática y el consumo excesivo puede incluso conducir al coma o la muerte por envenenamiento con alcohol.
Efectos psicológicos

Consumo de rutina y abuso del alcohol puede conducir fácilmente a la adicción. El consumo de alcohol en los adolescentes puede conducir a la depresión severa; estudios realizados por el Abuso de Sustancias y Servicios de Salud Mental muestran que los adolescentes de 12 a 16 años que beben alcohol son cuatro veces más propensos a sufrir de depresión que sus compañeros. Además, el 31 por ciento de los adolescentes de 12 a 17 que beben sufrir trastornos psicológicos años, mientras que el 39 por ciento mostró problemas de conducta.
Impacto en la vida escolar y social

Un adolescente de el consumo de alcohol puede tener un profundo efecto en su desempeño en la escuela, así como su vida social. La investigación realizada por la Asociación Médica de Estados Unidos ha demostrado que los adolescentes que beben tienen más probabilidades que sus pares a un mal desempeño en la escuela, y que el alcohol reduce enormemente el vocabulario y la memoria de los adolescentes de beber. De hecho, el alcohol puede causar a los adolescentes a tener en cuenta hasta un 10 por ciento menos de lo que han aprendido, en comparación con sus compañeros que no beben, según un documento de 2000 titulado "Alcoholism: Clinical and Experimental Research." Los adolescentes que beben también es probable que completar menos años de educación.
Impacto en la Familia

El abuso de alcohol y el consumo excesivo puede conducir a una posible adicción, problemas en la escuela, problemas con la ley y problemas de salud, que todos pueden conducir a relaciones tensas con los miembros de la familia. Un adolescente beber puede rebelando contra sus padres u otras figuras de autoridad, y esto puede llevar a peleas con miembros de la familia y un deterioro general en el entorno familiar.