Las numerosas variedades de uvas disponibles tienen llevado a la diversidad de vinos italianos. La uva Sangiovese es conocido como "el orgullo de Toscana", y ha sido reconocido por su afrutado hace, sabor a tierra, posiblemente ya en más de 3.000 años. El Dolcetto, que significa "poco dulce uno", ha crecido a lo largo de las regiones vitivinícolas italianos desde el siglo 16. Se adoptaron las variedades Malvasía de Grecia en la antigüedad y se dice que tienen un rico, redondo, de sabor con mucho cuerpo.

El método italiano de vinificación está fuertemente influenciado por la creencia tradicional de que el suelo de una región puede afectar el sabor, la intensidad, la acidez, color y muchas otras cualidades del vino. De hecho, muchos admiradores afirman que la terrenalidad de vino italiano que lo diferencia, a menudo con notas de la seta, la hierba y el suelo. El clima de una región determinada, así como del suelo afecta el sabor final de los vinos.
Métodos y Prácticas

En la vinificación tradicional italiana, las uvas se cultivan en hileras de vides en terrazas, a menudo separadas por muros de piedra. Suelo de cada terraza es diferente año tras año, como el suelo se erosiona desde la parte superior hasta la parte inferior, con el tiempo a ser devuelto a la terraza superior para continuar el ciclo de cambio del suelo de nuevo. Las viñas son rigurosamente podados y sacrificados para eliminar a los pobres de uva racimos, así como concentrar los esfuerzos y sabores las vides 'en las uvas restantes.

En la antigüedad, antiguos viticultores romanos adoraban a dioses del vino y la embriaguez nombrados Liber y Baco. Culto a menudo tomó la forma de ritos misteriosos y ofrendas en arboledas y lugares salvajes, con los participantes con la esperanza de las bendiciones de la fertilidad de la tierra y el cuerpo. Estas reuniones, denominadas bacanales, eran tan escandalosa que fueron prohibidos en el senado romano. El éxito o el fracaso de un viñedo se suelen atribuir a la voluntad de estos dioses, y tales rituales de adoración fueron considerados parte del proceso de elaboración del vino.

Mientras que muchos productores de vino modernos prefieren jugo mecanizada por razones económicas, algunos viticultores privados afirman que la única manera de producir el mejor vino es con el viejo método de extraer el jugo de la uva a pie. Las uvas se pisotearon los pies descalzos, tradicionalmente en una cuenca de piedra, hasta que todo el jugo fue puesto en libertad. Si bien este método es menos higiénico que jugo mecanizada, muchos viticultores juran que el esfuerzo adicional se traduce en un producto superior.

Barriles de vino

barriles de vino tradicionales en Italia más a menudo se hacen de roble. Roble se ha utilizado desde la antigüedad para hacer apretados, barriles no fugas. Oak también puede impartir un sabor natural agradable, comparado a menudo a vainilla, al vino. Barriles también pueden afectar el sabor del vino a través de la edad y de tostado. Por el envejecimiento y la carbonización el interior de los barriles en cierta manera, los productores manipulan los aceites naturales de roble para lograr sabores específicos.