Las sobras, como champiñones rellenos, deben refrigerarse a más de dos horas después de la cocción. Esto incluye el tiempo que el alimento está sentado en la mesa o en su plato. Si sus setas se quedaron en la mesa durante la noche, tirarlos a la basura. Almacene setas rellenas sobras en un plato llano, menos de 3 pulgadas de profundidad, dejando espacios de aire en torno a las setas para que el aire frío llegar a la comida. Ajuste el refrigerador a 36 a 38 grados Fahrenheit para mantener la temperatura en el interior por debajo del límite de seguridad de 40 grados Fahrenheit.
Microondas Recalentamiento

Las microondas ofrecen una forma conveniente para recalentar champiñones rellenos. Cocina de microondas puede secar las setas más, pero es importante para calentar la comida sobrante a por lo menos 165 grados Fahrenheit. No obstante, las microondas no matar a todas las bacterias. Por ejemplo, la bacteria Staphylococcus aureus pueden causar episodios desagradables de la intoxicación alimentaria y es resistente al calor. Por lo tanto, si las setas rellenas son dejados de lado durante la noche, que podrían presentar un peligro para la salud, incluso si usted los microondas. Gire las setas a mitad de la cocción para asegurarse de que se calientan en todo.

Ingredientes

Algunos ingredientes presentan más problemas que otros. Por ejemplo, las aves de corral, el queso crema, el pescado y los mariscos son caldo de cultivo perfecto para las bacterias. Si sus setas rellenas contienen rellenos como picada de pollo, cangrejo o atún, entonces es una buena idea para que los guarde en el refrigerador tan pronto como sea posible después de la cocción. Si los dejas a cabo durante la noche, hay muchas más posibilidades de que los hongos no son seguros para comer.

Consideraciones

En climas cálidos, con temperaturas de 90 grados Fahrenheit o más, la comida, como champiñones rellenos se debe refrigerar un máximo de una hora después de la cocción. El calor permite que las bacterias se multiplican más rápido y la comida estropear más rápidamente. En ambientes muy calurosos, las temperaturas de la puerta del refrigerador se pueden subir y bajar. Es más seguro para guardar la comida sobrante en la parte más fría de la nevera, por lo general el estante del medio.